Por una vez en la Tierra de Mordor la niebla se desvaneció, los rayos del Sol irrumpieron en la apacible vida de las criaturas de la Comarca, iluminando fachadas, calles y plazas, dando lugar a una escena insólita. Aquel día las calles se llenaron de ruidosa muchedumbre que, dejándose llevar por la momentánea retirada del frío, se dirigía con paso solemne a la plaza mayor. Allí, como en un gran festín, los cerdos colgaban de afilados ganchos atados con gruesas cuerdas, el cocinero alimentaba las llamas, y los comensales se iban sentando uno a uno mientras observaban la gran cantidad de manjares que allí se ofertaban.
En seis personajes se centra nuestra historia, aunque más tarde se añadieron cuatro más:
Y aquel día, degustando todo tipo de alimentos y bebiendo jarras de cerveza, se gozó de un buen ambiente soleado, con conversaciones amenas y divertidas. Lujoso paréntesis en estas tierras...
दाविद परेज़
1 comment:
Muy bonita la descripción. Anda que después podrás decir que tienes mucha faena. Que buena vida. Aunque bueno supongo que en el fondo se trata de eso no ;P
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